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sábado, 3 de marzo de 2018

Oscar 2018: Actriz de principal


Por Paulo Campos


Categoría reina donde las haya para los Oscar-fan-boys, de los que el 70% matarían por ser incluidos en esta categoría junto a Nicole Kidman, Julianne Moore y el resto de actrices que hay en el mundo que no son ellas, porque no conocen a más. Bueno, quizá una tal Chastain, que hizo alguna película. Una vez más, una categoría muy apañada. Este año a años luz de la de mejor actor y con varias candidatas quedándose a las puertas. Y venga, una vez más estamos de enhorabuena porque las cinco son PROTAGONISTAS de sus películas, sin cortapisas, sin dudas, sin Felicitys Jones. Es decir, que si se quiere se pueden crear personajes femeninos sin depender en la pantalla del papel de un hombre. Pues chico, ya tenemos la receta. Ahora a hacerlos, porque estamos viendo que dan juego a la taquilla y enriquecen historias.
No sé si es un cambio en Hollywood que se va a apuntar a la huelga feminista del 8 de marzo (yo sí, claro) o qué, pero en los últimos años van desapareciendo esas candidaturas a la "mujer de..", "personaje femenino que completa a..", y demás. Incluso se abren a nominar a actrices que no son nada el star system habitual. Porque, no nos engañemos, nadie se mata por invitar a sus programa a Sally Hawkins o Frances McDormand. Pero mira, bienvenidos sean los cambios. ¿Será por el número de votantes que se aumentó y de los que la mayoría de novedades fueron de actrices o actores de minorías? No sé, a lo mejor simplemente son votantes que ven las películas, quién sabe.

Las que se quedaron fuera por el pelito de una peluca de Viola Davis son, sobre todo Jessica Chastain por Molly’s Game, en la que vuelve a pecar de frialdad. Y quizá su falta de mesura (gracias eternas por ello Jessi) en su twitter haga que le vaya a costar ganar el Oscar. Luego también sonó la niña Brooklyn Price por The Florida Project, pero la peli no la vio ni la familia de ésta. También andaba por ahí Judi Dench por hacer otra vez de Reina, que vamos, la rueda mientras pone el té a hervir. Este año no tocaba, porque toca el de reivindicar la igualdad de las mujeres. Porque si hubiera quedada vacío la campaña sería la de nominar a Daniela Vega por Una mujer fantástica, donde está pletórica. El titular "primera mujer trasgénero" en ser nominada a un Oscar sería muy jugoso, le faltó un par de premios de la crítica para entrar en la conversación. Pero el quinteto final parecía bastante claro desde diciembre, son estas:


-Sally Hawkins por The Shape of Water


Dramatización (basada absolutamente en hechos reales, como siempre):

-Hola Sally Hawkins, soy tu representante... sí, ese que no se gastó 20 pavos en promocionarte por Happy-Go-Lucky cuando tenías la candidatura en el bolsillo. Pues mira, este año te dejé hacer la tonter... la peli esa de la pintora que ni yo me acerqué a ver. Pues mira, ahora me ofrecen para ti el papel de madre en una peli para adolescentes que tiene pinta de funcionar y que será una saga, qué bien, ¿no? Ah, y me llegó también una mierda de un mexicano de no sé qué de una muda y un salmón o algo así. ¿Te lo puedes creer? Jajaja. Bueno ¿Qué, Sally Hawkins? ¿Digo que sí a “La huida del amor: la aventura mortal fatal”, no? ¿Eh, Sally Hawkins? ¿Eh, Sally Hawkins? 
Y entonces la buena de Hawkins nos regaló una interpretación excelente. De un punto de partida tan bizarro saca oro, y hasta nos convence de que la rana Gustavo 2.0 tiene atractivo y hasta puede follar. Vamos, que es un salto desde 200 metros sin paracaídas (en la segunda escena ya está haciendo manualidades en la bañera y no precisamente fofuchas de goma eva). Y ahora recoge los frutos, todo han sido alabanzas, varios premios de la crítica y el reconocimiento de la inconmensurable actriz que es la Hawkins. Después de Blue Jasmine consigue su segunda nominación, y porque ya sabemos lo que pasó con Happy-Go-Lucky.

Opciones de victoria: Poquitas, lamentablemente. Pero es que el nivelazo de este año es altísimo y además el papel puede echar p’atrás a algún votante viejuno que ve normal que Melania se folle a Donald, pero no que Hawkins se folle al primo de Ariel



-Frances McDormand por Three Billboards Outside Ebbing, Missouri

Que es una actriz como la copa de un pino no lo pone en duda nadie. Pero lo que me fascina de Frances es que se la suda tanto todo que se convierte en la reina de sarao allá por donde pasa, y además esa especie de hipnotización masiva que crea sobre los espectadores que la ven recoger un premio y esperan que ocurra algo como Moisés dictando las tablas de la ley. Hasta ese punto de “estoy viendo a alguien que mola más que yo” llega McDormand, y que alguien como ella tenga su segundo Oscar es algo que le mola a todo el mundo, menos los haters de siempre, que hasta se atreven a criticar a alguien como ella, que tiene que molar tanto estar a su lado (10 minutos porque luego tiene pinta de o ser una intensita o de sentarse a comer cereales mientras limpia su Beretta).
La historia detrás de la nominación es que Martin McDonagh (Dios los da y los Mc se juntan) escribió el guión pensando en ella y no paró hasta la que la consiguió. Lo que me hace pensar que igual tengo que empezar a acosar a Joan Allen si quiero que sepa que existo. Y claro, el personaje le queda como anillo al dedo. Una mujer fuerte, deslenguada, gañanaca y que a pesar de ser una white trash de manual podría matar a zascas a Oscar Wilde en su mejor momento. La McDormand se lo pasa en grande en los momentos que es estrella cómica de la función, pero demuestra que si le cae un drama ella lo clava, porque en las escenas apagafuegos está que se sale de la pantalla. En fin, que una creación de personaje de manual que hace de las escuelas de interpretación un chikipark.

Opciones de victoria: Todas, ganó todos los premios habidos y por haber. Y el resto de candidatas son geniales, pero dividirán más el voto. Además, ¿a quién puede molestar que se diga “la ganadora de dos Oscar Frances McDormand”? A nadie, sólo a mala gente que merece pasarse con Frances Macdormand varias horas a solas en una habitación.



-Margot Robbie por I, Tonya

Que me gusta a mí esta nominación. Es la nominación “que sólo soy una cara bonita y una piernas digitalemente largas, pues sus vais a cagar”. Y vaya si lo hacemos, ella se busca un material -que no le llegan- para poder ser actriz y no cuerpo, se convierte en productora y busca al director y encima se deja en las manos de éste para sacar petróleo. Vamos, que la Robbie es más lista que una avellana y se marca un Witherspoon para enderezar su carrera y mostrar que Suicide Squad vale, porque paga mansiones, pero también quiere papeles que le requieran esfuerzo. Vamos, algo que sería lo lógico, Hollywood lo convierte en extraordinario. Y a ella le da la primera de sus nominaciones al Oscar porque si esta mujer sigue así no tardará mucho en tener la segunda y en pasar a la lista de “actrices a las que les debemos ya un Oscar”.
Si el personaje de McDormand era algo white trash, Tonya Harding es la reina, una patinadora que pasó a la historia por ser la primera en dar más vueltas en el aire que una Minipimer y por hostigar a peña a forrar a hostias a su mayor rival. Vamos, los que viene siendo el sueño americano. Heroína y villana, pero un bombón para cualquier actriz. Y ojo, que aún encima aquí se nos presenta como un biopic original, con juegos con el espectador y un humor negrísimo a la hora de presentárnosla. Y encima Robbie se deja la piel en cada una de las secuencias para que la amemos y odiemos a partes iguales, aunque a mí Tonya Harding siempre me ganó y no precisamente por dar volteretas, porque después de los de la paliza a la tonta de la otra se dedicó a la lucha libre y demás mierdas que, vamos, me hago una camiseta ya.

Opciones de victoria: Nadita, la peli es muy especialita y no cuajó del todo bien en las nominaciones, por lo que da la sensación de que ella no entró sobrada. Pero vamos, que es de justicia que tuviera un puñado de votos.



-Saoirse Ronan por Lady Bird

La coña de cómo cojones se pronuncia el nombre de esta niña ya quedó atrás, porque lo que parecía una actuación de suerte de una niña en Atonement, se vio que no, que Saoirse era la nueva... (insertar aquí el nombre de la actriz cuya carrera no tiene nada que ver con la de esta chica, pero que mola citarla porque se queda bien) cuando nos encantó a todos en Brooklyn, incluso queriendo que Brie Larson perdiera y ella ganara (dios nos perdone a los que seguimos queriéndolo, por mucho que amemos a Larson).

Si en la peli irlandesa era una muchacha aguerrida pero dulce y algo pastelosa, en Lady Bird es un chica atrevida, descarada y que quiere ser mejor que todas las demás en todo y lo que es peor, ser una intelectual. Vamos, que es un autobiopic de Greta Gerwig. A una tipa que todos odiaríamos -alguien que se llama a sí misma “Lady Pájaro” ya es pa echarle de comer aparte-, pues bien, aún así queremos a Christine (toma, que te llamo así) y nos gusta su verborrea que no soportaríamos en nuestra vida real. ¿Y Ronan qué? Pues disfrutando cada segundo, regodeándose en un regalo de personaje y aportando una vis cómica que no se la conocíamos. Debe ser lo que se llama crecer como actriz, cosa que no le permiten a muchas. Vamos, que tenemos a Saoirse para rato, afortunadamente. Y déjate ver que de aquí a menos de un año no esté escribiendo sobre su personaje en Mary, Queen of Scots, mandando cortar la cabeza, precisamente a Margot Robbie.

Opciones de victoria: En diciembre parecía más, pero el huracán McDormand es demasiado fuerte. Se lleva el Globo de Oro y el juego del programa.



-Meryl Streep por The Post

Aquí la señora Streep consigue su vigésima primera nominación. Agotador, bastante. Pero mira, de las últimas trres esta es la más justa. No porque lo haga mal porque en Into the Woods y Florence Foster Jenkins. Está bien, pero la nominaron porque es ella. Está claro que no lo necesita, pero es una señora que cae bien, se mete en política cuando hay que meterse, y en estos últimos tiempos-en los que se le acusó de no haber hecho nada por remediar los abusos al que otras chicas estaban sometidas, no hizo el efecto que su detractores querían, sino el contrario. Sigue siendo querida, admirada y venerada. Esta nominación lo demuestra.
La peli de Spielberg, es la más injustamente tratada en esta temporada. Vale, está nominada a mejor película (sólo faltaría), pero la Streep es su única candidatura a mayores (harbase visto), mereciendo al menos cinco más. Salva los muebles ella con un personaje que le va como un guante. Una mujer superada por las circunstancias, ya que hereda un cargo para el que no la habían preparado -de hecho la habian preparado para dar fiestas y vestirse bien-, pero que con carácter y ovarios demuestra que una mujer puede hacer el trabajo para el que sólo los hombres creían que un hombre sólo podría hacer. Vamos, que la peli de Spielberg es feminista y ella lo aprovecha. ¿Y sus tics? Sí, la Streep por mucha veintena de nominaciones que tenga, los tiene y se repiten. Y aquí no podía ser menos. Y para ello tengo que agradecer a mi adorada Isabel Ampudia (perdona por nombrarte en mis artículos, mereces que alguien que sepa escribir te nombre y no yo)  darme unas clases de “cómo actúa la Streep”. Tenemos esa mirada al infinito para emocionarse (ver la escena con la hija en la habitación) y el quitarse las gafas de cuantas más y más extrañas maneras sea posible (joder, ved la escena con la hija sentada en la cama). Y aún así, Streep mola, tenga o no las nominaciones que merecía.

Opciones de victoria: No toca, ninguna. La peli no tiene fans y la nominación es porque es ella. Si el papel lo hubiese hecho otra actriz, aunque lo hubiese hecho mejor, no olería la alfombra.



Gana: Frances McDormand

Debería ganar: Pondría Hawkins o Ronan, pero es que le debo tantos buenos momentos a McDormand que no puedo serle infiel.

Debería estar: Jessica Chastain (eso sí, no sabría a quien quitar)

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