Oscar 2018: Dirección

Por Paulo Campos

Como veis, la utilización del lenguaje es una de las cosas que cuido de cojones y ahora ya pongo “dirección” en lugar de “director”. En teoría, lo tendría que haber usado cinco veces en 90 años de Oscar, porque después de Lina Wetmüller, Jane Campion, Sofia Copola, y Kathryn Bigelow, por fin tenemos a la quinta mujer nominada en esta categoría. De ellas, sólo la gran Bigelow recogió la estatuilla y le pasó por la cara a su ex batirle con una peli de tres duros a todo un Avatar. Como diría Nelson Muntz: “ja,ja”. Pero ya hablaré más tarde de la Gerwig, ahora voy a hacer un resumen del trabajo de dirección de una película, que básicamente consiste en “que la película quede bien” y ya está. A ver, es verdad que luego puedes utilizar a los actores para que luzcan más o menos, que los decorados, vestidos y maquillajes queden genial en pantalla, incluso que una foto o un montaje brutales hagan crecer a tu peli, pero sobre todo es que el guión que te dieron esa panda de sinvergüenzas que son los guionistas haga una buena peli. Y ya está, es sencillito ¿no?

Otra cuestión a la hora de valorar (de cara a los premios, que es de lo que hablo yo, eh) si una dirección es guay o no, es si mucha personalidad es buena o mala, si el director más que preocuparse por hacer un buena peli, se preocupa de que se sepa que es su peli. Los Oscar no son mucho de esta cuerda. De hecho, nunca premiaron a Tarantino, no nominan a Allen, ni tampoco a Michael Bay (increíble). Sin embargo, sí les mola más cuando aún sin personalidad alguna dirigen una peli “larger than life” Minghella, Atemborug, Gibson, y todos estos directores cuyo sello personal en una película es su nombre en los créditos.

Este año arriesgarse de cara a las nominaciones, no se arriesgaron. Porque sí podían haber optado por direcciones un poco más atrevidas. Así dejaron fuera a Luca Guadagnino (es que Call Me by Your Name se dirige sola, porque esas actuaciones y esas colocaciones de cámara no son obra del Espíritu Santo, porque que se sienta el agua, el calor y esas miradas entre Elio y Oliver son fruto (nunca mejor dicho) de una dirección espléndida). También Spileberg demuestra cómo se dirige una película como “The Post”, donde menos es más, y una vez más queda fuera. Incluso podrían haber doblemente nominado a mujeres (y no Patti Jenkins por Wonder Woman, no, no es una película para nominarla a nada) sino la Bigelow que hace un trabajazo en Detroit. Incluso, si alguien la hubiese visto, arriesgarse con Sean Baker en The Florida Project. Y bueno, también está McDonagh, que el día del anuncio de las nominaciones debió llorar lo que no está escrito ( y lo digo por su guión) al no verse en el quinteto (Affleck, Affleck, Affleck). En fin, que todos ellos harían una categoría igual o mejor que la que quedó finalmente. Estos son las cinco direcciones nominadas:

-Paul Thomas Anderson por Phantom Thread

La mayor alegría de las nominaciones vino por parte del maestro Anderson, amado y odiado a partes iguales. Pero quien lo ama, por él mata, mata. Llegó un poco tarde al reparto de premios de la crítica, porque la peli se estrenó a finales de año y de ahí que Anderson no estuviera ni en Globos, ni en otros premios tan importantes como los Satellites Awards. Por eso fue sorpresa la nominación, pero no por la calidad de su trabajo. En Phantom Thread todo, como siempre en la filmografía de Anderson, está estudiado al milímetro. De un inicio de una peli de “tés de los noventa” comienza un crescendo tan negrísimo como el futuro político de García Albiol.

Se pueden loar ciento y una habilidades en la dirección de este tipo. Porque dirige bien a los actores, sabe donde colocar la cámara -y nunca mejor dicho, porque la dirección de fotografía es de él mismo-, pero es que además se refinó poco a poco, porque consigue reducir los metrajes de sus películas. Hace unos meses en un entrevista le preguntaban qué cosas cambiaría de su filmografía y decía que reduciría media hora el metraje de Magnolia. Bien, pero ¿qué coño cortarías? Porque tu vida podría peligrar que hay mucho “magnolier”

Pues con esta consigue Anderson su segunda nominació,n después de la conseguida por There Will Be Blood. No, no fue candidato por Magnolia. No, no lo fue por Boogie Nights. Y no, yo tampoco entendí una puta mierda de Inherent Vice.

Opciones de victoria: Ser la sorpresa de las nominaciones fue guay, pero me da que sus posibilidades de volver a sorprender con su victoria son mínimas. De hecho, tiene menos posibilidades que la de ver a Anderson dirigir una de Marvel (a ver si van a ser muchas y gana).

-Greta Gerwig por Lady Bird

Como ya conté antes, Gerwig es la quinta mujer que es candidata en 90 años de Oscar al premio a mejor dirección. De entre las que sonaron a la nominación este año (Dee Rees, Patti Jenkins, Kathryn Bigelow) finalmente fue esta diosa la que se llevó el gato al agua. Técnicamente, Lady Bird no es su ópera prima, porque dirigió una de las películas más taquilleras de la historia del cine Nights and Weekends, junto a Joe Swanberg, que podría ser el video de una borrachera de ambos, porque nadie tiene puta idea de lo que es. Pues bien, después de semejante debut podemos considerar a partir de ahora que Lady Bird es su primera peli ¿Queda? Queda.

Es curioso, porque Lady Bird no es una película de las que asombre a la gente por su dirección, pero sólo si la miramos desde muy muy lejos, las pelis sencillas son difíciles de dirigir y tienes que tener mucha mano. Primero, con la pasta que tienes para hacer algo que valga la pena ver, y luego ganarte a tus actores para que sean lo más destacado de la peli. Parece fácil, pero Lady Bird es un buen ejemplo de dirección, conservar el tono de la peli, que vaya en la dirección que Greta quiere y que no haga chirriar al espectador con escenas que no encajan. Por eso celebro que los colegas tuvieran en cuenta su trabajo.

Pero, ¿está nominada sólo por ser mujer? Pues si leísteis el artículo anterior o al ver como empiezo el párrafo fuisteis directamente aquí, a ver si me podíais denunciar yo no lo creo pero seguro que habrá quien si. Pues vale no puedo demostrarlo, bueno, sí, que yo todo lo puedo, pero creo que “Lady Bird” caló bastante para hacerlo por si sola. Quien sabe

Opciones de victoria: Pues ojito, el discurso feminista lo tiene, ella es querida y si quieren ver un cambio en la Academia esta es la candidatura ideal, tanto de peli como de persona. Aún así diría que no tiene muchas pintas de que dé la campanada. Qué feliz me haría

-Christopher Nolan por Dunkirk

Por fin Nolan nominado. Sus fans estarán encantados, dirán que debió haberlo sido por Memento, por The Dark Knight y por Inception. Tres veces, tres, en las que la Academia le dijo: “nos caes fatal, no nos gustas”. Este vez no han podido escapar, porque desde que se estrenó Dunkirk era todo un clamor su nominación. E inevitable. Así que muchos votantes cogieron el sobre con su nombre, se taparon la nariz con una pinza y votaron por él.

Dunkirk es una sacada de polla, como todo lo que hace este señor, considerado por muchos -sobre todo por él mismo- como el “Mejor director vivo” (si es que realmente lo está, porque por dentro dicen que no). Al nene se le antojó rodar la evacuación de la playa francesa por parte del ejército inglés en tres tiempos diferentes (después de sumergirnos en 3203829 niveles de sueños, y de haber gente que se lo comprara, esto es un juego de niños), en tierra una semana, en mar un día y en avión una hora. Si no viste la película es difícil que yo te lo pueda explicar, y así tú y yo ganamos minutos de vida. A ver, fuera bromas, es un trabajo muy muy bueno, las escenas de la playa, de los naufragios y de los aviones son un prodigio técnico impresionantes sin poder ponerle un pero...Ajá, pero aquí va mi pero, el corazón. Sus películas, para mí, y aviso que tengo una armadura del siglo XV puesta por si alguien quiere lincharme, no tienen alma, son como las de David Fincher (aquí, ganándome followers) y un director a mí me conquista por ahí. Así que nominación merecida, sí, me moriría si le dice “mira, pa chulo nuestro pirulo y no te nomino por cuarta vez” pues me hubiese molado más).

Opciones de victoria: En septiembre todas, en octubre pocas, en noviembre menos y ahora pocas. Aún así me sorprendería que no estuviera en el Top 3, y si hay igualdad pues puede haber carambola.

-Jordan Peele por Get Out

Hola, Jordan Peele, por fin nos vemos las caras. Veo que al final te nominaron al Oscar, enhorabuena, has conseguido engañar a medio mundo con tu peliculita, ¿no? ¿Así que quisiste hacer una metáfora sobre USA, no? NO TE LO CREES NI TÚ. ¿Que no eres un farsante? ¡Madre mía te digo yo a ti que sí!

Me pones a un “sospechoso” corriendo hacia el prota y en el último momento se gira artificialmente porque quieres darme miedete. ¿Qué es esto, “los teletubies van a la casa del terror”? Luego me pones al amigo del prota en una película distinta a todos los demás porque quieres poner un negro gracioso. Pero vamos a ver ¡qué coño me quieres contar con eso! ¿Qué película estoy viendo? ¡Ah! Y luego encima quieres que me trague lo de los algodones en los oídos y todos solucionado. Mira, yo soy muy cabezón y no me vas a convencer con tu twitter (que es cojonudo y tú molas) de que tu película está bien dirigida, por muchos premios que te hayan dado. Caíste en un año que te vino de perlas, lo aprovechaste, haces bien, pero sigue rascando porque mi boleto no traía premio para ti. Aun así tiene mucho mérito que por tu ópera prima, de un género poco premiable en los Oscar, te hayas hecho un hueco. Te espero con el boli afilado para la próxima, a ver de lo que estás hecho.

Opciones de victoria: Lo que me faltaba. Get Out no está bien dirigida, eso no es razón para dejar de premiar con un Oscar, pero The King’s Speech o A Beautiful Mind dan gloria verlas al lado de tu inventito

-Guillermo del Toro por The Shape of Water

Si hace unos años nos dicen que del Toro va a ganar en Venecia y va a estar nominado al Oscar por una peli suya, que no de encargo, no nos lo creemos nadie. Y mira, después de bastantes años en Hollywood, después de empezar y abandonar mil trescientos proyectos y de en el camino, supongo, hacerse amigo de todos los que con él coincidieron porque el tipo parece buen tipo. Aún nos creeríamos menos que lo fueran a nominar por una historia con sus monstruitos, pero mira tú por donde, que esta vez sí terminaron lo que se intuyó con El laberinto del fauno, que gustó a Hollywood un montón. Esta vez le han dado 13 nominaciones a su peli, una por cada monstruo que paseó por Los Angeles.

En plena era Trump resulta edificicante que otro mexicano pueda ganar este premio, lo que significaría que en cinco años cuatro veces se lo llevaría un mexicano. Es más, en caso de que ganaran él o Nolan, desde el 2010 sólo un estadounidense habrá ganado este premio. Fuera de esta anécdota, del Toro mola, y aunque no sea mi peli favorita, su trabajo en The Shape of Water es bueno a rabiar (lo que muchos hacen cuando la ven). Por mucho que no lo reconozca, Amélie está muy presente en la peli y le da un halo de barroquismo fantasmagórico a un cuento de hadas ya bastante peculiar. Le falta un gnomo, porque luz roja hay para aburrir. Tampoco se complica a la hora de presentaciones, estos son los buenos y estos son los malos. Son los pequeños detalles los que hacen buena la dirección de del Toro, y casi todos tienen que ver con las escenas que comparten Hawkins y Jenkins. Y creo que hablo por todos, los que aman y los que odian (hace falta ser muy mala persona para odiar esto) la peli que la mejor secuencia es la musical y en blanco y negro. Chazelle se llevó el pasado año el premio por rodar muchas escenas iguales, Guille también sabe hacerlo.

Opciones de victoria: Premios se los llevó todo, Martin MacDonagh no está nominado y el resto de candidaturas dan la sensación de comparsas del mexicano. Ahora mismo es el gran favorito y hasta el cuatro cuando abran el sobre lo seguirá siendo.

Gana: Guillermo del Toro

Debería ganar: Paul Thomas Anderson

Debería estar nominado: Si me tengo que quedar con uno de los que dije, Luca Guadagnino.