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viernes, 13 de mayo de 2016

Críticas: High-Rise

3/10
High-Rise (Reino Unido, 2016).
Dirección: Ben Wheatley.
Intérpretes: Tom Hiddleston, Sienna Miller, Luke Evans, Jeremy Irons, Elisabeth Moss, James Purefoy, Keeley Hawes, Peter Ferdinando.
Guión: Amy Jump, sobre la novela de J.G. Ballard.
Música original: Clint Mansell
Fotografía: Laure Rose.
Montaje: Amy Jump y Ben Whealey.
Idioma: Inglés.
Duración: 119 minutos.


Catastrófico desconcierto

Por David Sancho

Extraña película la que se ha sacado de la manga Ben Wheatley, director ya muy acostumbrado a no dejar a nadie indiferente. Personalmente, antes de ver High-Rise solamente había visto otra película suya, Turistas, otra película poco convencional, con mucho potencial que, al igual que High-Rise, me dejó con la sensación de que se podía haber sacado mucho más de ella.

High-Rise trata de un médico que se instala en un rascacielos en el que sus habitantes pueden encontrar todo lo que necesitan sin necesidad de abandonarlo. Una especie de ciudad en la que sus conciudadanos conviven en armonía, al menos hasta que esta se acaba.

La Torre Elysium alberga a un grupo variopinto de personajes. Hay momentos en el que ese edificio me recuerda al de Delicatessen, con ese sinsentido pasado de rosca, con la diferencia de que en la película de Caro y Jeunet la cosa tenía gracia y aquí, sin embargo, todo resulta desconcertante, farragoso y aburrido.

La película funciona como metáfora de la lucha de clases y de la destrucción del planeta a cargo de la raza humana, pero más allá de eso la cosa hace aguas. Sin duda se trata de una obra interesante que generará mucho debate, ya lo generó a su paso por festivales, pero que a mi me deja esa sensación de que a su director se le ha ido de las manos. Tanto ruido acaba por hacer que el espectador pierda un poco el norte y que no se quede con lo importante.

Sin duda la película tiene una muy buena factura técnica, el envoltorio es fascinante, y además tiene un reparto sensacional, que funciona a las mil maravillas. Lo cual hace que sea aún más decepcionante el resultado final.


Algunos encumbran a su director como uno de los grandes del cine actual y otros tildan sus películas de idioteces. Posiblemente haya que esperar un poco más para ver en qué grupo encaja mejor, o si se queda en un punto intermedio. Yo por ahora le doy un voto de confianza porque valoro mucho el riesgo incluso cuando el tiro sale por la culata.


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