Oscar gana un Leo

Por Paulo Campos

Actriz principal:

La categoría de mejor actriz es la que más pasiones levanta entre los Oscar-Fan-Boys, no sé si por mitificar a las muchachas a por compartir sus bolsos (festivaaaaalllllldel humor) pero siempre es uno de los eventos esperados, qué actriz joven, talentosa, guapa y que en el futuro no hará mucho más será la ganadora del premio. Este año, como casi siempre tenemos donde escoger, entre veteranas, la de fuera, la de siempre y las dos nuevas.

-Cate Blanchett por Carol: la australiana consigue su sexta nominación al Oscar por intepretar a una especia de Jasmine de los 50, una señorona de esas que desayunan croissant todos los días y tiene una señora filipina que viste con cofia y le cuida a los hijos, que se ve que le pica ahí abajo y le da por cambiar el croissant por el bollo recién horneado. Esto es básicamente Carol y ella hace de la señora, no de la filipina.

Ganará si: sucede un milagro, ni le hace falta, ni es su mejor papel, ni Carol tiene mucho que aportar en una categoría que parecía destinada a su otra protagonista. Da el toque de elegancia a la categoría, con lo que quien gana es la ceremonia y nosotros.

-Brie Larson por Room: debo ser la única persona en el mundo que no ha entrevistado desde octubre aquí a Brie, eso si, me ha retuiteado un par de veces cuando he puesto que ganaba algún premio o que lo hacía muy bien. Se le ve algo ansiosa a la muchacha y es que después de quedarse a las puertas de premios y reconocimiento en ascensores por su papel en Short Term 12 ahora se agarró al famoseo con todas sus fuerzas y aprovecha recibir elogios por doquier por esa madre encerrada en la habitación que a su vez es hija de Joan Allen, vamos, como para no ganar premios con una madre así.

Ganará si: todo sale como se espera, es la favoritísima, lo merece, y se está haciendo ya un lugar en Hollywood. De momento estará en la próxima de King Kong sin careta, que ya es más de lo que puede decir Lupita N'yongo tras su Oscar.

-Jennifer Lawrence por Joy: momento GH1 “Jo-de-te” David O. Russell que esta vez no coló. Tu peli es tan mierdera como las otras con las que conseguiste 8 y 10 nominaciones pero es que esta no has amenazado suficiente, ni pagado lo suficiente, como para hacer que los críticas digan que es buena, porque no, es una puta mierda de película, una sucia oda al capitalismo más absurdo, al paletismo más recalcitrante, es decir lo que ha sido tu cine. Eso sí, has conseguido que Lawrence te salve de irte a casa con las manos vacías, porque ella, es verdad, es, de lejos, lo único salvable de una película que falla en los mismo que tus anteriores “obras”: no sabes dirigir, no sabes darle un tono a una película y para colmo me caes mal a mí.

Ganará si: ni de coña, estaría bueno, ella lo hace bien y es la peli, pero ni es su mejor papel ni merecía estar ahí quitándole el sitio a Charlize Theron, por ejemplo. Espero que por muy bien que caiga la muchacha, que a mí me cae de puta madre, y no, no me canso de ella por mucho que los de siempre digan, la gente se harta de ella, y está claro que no, porque la chavala tonta no es y sabe medir sus apariciones.

Charlotte Rampling por 45 Years: ni el los Globos de Oro, ni en los Bafta ni en muchos de los premios importantes aparecía la Rampling, pero es que las divas no necesitan presursores, aparecen en los Oscar y dan lecciones de coherencia cuando hablan. Ciñéndome a la interpretación diré que es de las mejores, si no la mejor, del año, que da sopas con hondas a jovencitas y no tanto que dependen de un rimel para actuar y que es una gloria nacional eurpoea que se pasea por Hollywood mirando casi por encima del hombro a principiantes que le van a quitar el premio pero no llegarán en su vida a su prestigio. Rampling, a sus pies.

Ganará si: juntara algún votos más de los que le llevaron a la nominación, pero no, no va a tener más. Su éxito es ese, que los votantes europeos se lanzaron en masa votándola, pero es que los americanos ni la conocen, los votantes, imagínate qué americano de a pie quiere ver a una señora mayor con un Oscar. Vamos, antes invaden el país que sea, y si es Francia mejor, por la rabia que le tiene (bueno, si es que saben que Francia es Europa, o lo que queda de ella).

Saoirse Ronan por Brooklyn: lo que parecía ser un “niña adolescente que lo hace guay en una peli, la nominamos y no volvemos a saber nada de ella hasta que la detengan con droga y con el cadáver de Lindsay Lohan en el maletero” pues no se ha forjado la chica una carrera muy respetable, tomándose su tiempo y elegiendo un papelazo que quita el aliento. “Sursa Ronan” que así se pronuncia si no queréis pecar de ser de la pandilla de Jennifer Lawrence, es decir, unos paletos, cuando en miles de conversaciones que tengáis salga, inevitablemente su nombre a colación, hace una de las interpretaciones del año y así se lo han reconocido en todas partes. Esperamos más de ti, querida.

Ganará si: no está Larson, la batalla entre las dos ha sido épica, pero la balanza se decantó al lado de la americana, que raro, ¿No? De todas formas está la manida frase de “ya tendrá más oportunidades”

Actor principal:

Normalmente las categorías de actor y actriz van paralelas en aquello de joven, medio veterano, medio desconocido, veterano y el regreso de la ex estrella y así llevamos años y años. Este año resulta ser diferente y parece que los académicos se decantaron por crear una categoría para decir lo guapos que son todos los buenos actores, o es al revés, o mejor, que sólo pueden ser actores , y buenos, los que son guapos. Y luego está Bryan Cranston. Pues eso, que los nominados este año son:

-Bryan Cranston por Trumbo: a nadie gustó la película, sólo al gremio de actores, que la nominaron a todo. Pero es verdad que Bryan Cranston debe: a) ser buen tipo y todos lo quieren y lo votan o b) ser muy mal tipo y todos le temen y le votan, es la explicación porque lleva unos años que en poco le enmoquetan desde su portal a todas y cada una de las entregas de premios para ahorrarse tener que poner y sacar las alfombras rojas. En la película hace del escritor perseguido en la caza de brujas anticomunista, vamos que es contemporánea en España

Ganará si: está todo tan reñido que dos o tres votos marcan la diferencia, pero tiene que darse una alineación de planetas brutal, porque creo que cualquiera de los otros cuatro gana antes.

-Matt Damon por The Martian: un astronauta perdido en Marte y su lucha por sobrevivir no parece un papel hecho para ganar premios, y menos en los Oscar, pero mira, Scott dio con la clave y de hacer una película impersonal y ligera de pronto se vio como una de las favoritas a los premios, es de estas cosas que pasan y sigues preguntándote el porqué. Como Pablo Motos y su éxito. Damon -currante él- este año hizo todo lo posible por meter la pata para ser expulsado de Hollywood, desde declaraciones supuestamente homófobas, luego no fueron tal, hasta hablar de racismo, hasta, vamos ir de listillo. Pero nada, en Hollywood le quieren y da pasta, qué más va a pedir.

Ganará si: la carambola de antes se produce y le da por ahí, por premiar a uno de sus chicos de oro sin importar que el papel sea de menor o mayor relevancia o que Sandra Bullock lo haya hecho antes de ayer.

-Michel Fassbender por Steve Jobs: la carrera de Fassbender está en pleno apogeo, de no saber ni quién eran hemos pasado todos a amarle, envidiarle y querer ser él. Y encima de todo eso es buen actor. Su Steve Jobs, además de físicamente parecerse, es uno de los papeles del año y el cómo lo hace, dan aún más ganas de romperle la cara de envidia. En Hollywood es querido y después de dejar a Vikander se ha ganado el voto de miles de millones de académicas femeninas tirándoselas a todas, así que la cosa va a estar reñida.

Ganará si: le quieren joder la noche a DiCaprio, o poner en aprietos a Kate Winslet por ver qué cara pone cuando su Leo pierda pero su Michael gane. Es decir, que ganará si a los académicos les da por marcarse un jackass, que no digo que no se lo merezca Fassbender, pero tendrá que esperar a que le llegue un papel donde vuelva a enseñar el trabuco, que eso siempre da votos.

-Leonardo DiCaprio por The Revenant: después del auténtico robo que le hicieron por The Wolf of Wall Street hace un par de años, Dicaprio vuelve a la carrera por un personaje, que no es el mejor de su carrera, pero desde luego nos lo venden como el salvador y sumo hacedor de una película inrodable (no sé si existe esta palabra pero si no espero que la RAE la admita, total una mierda de palabra más) donde el hombre va por la pantalla hecho unos zorros y habla menos que John Wayne en su primer casting. Tiene mérito y ahora mismo ¿hay algún actor más famoso que él?

Ganará si: los académicos no quieren morir linchados por una turba con antorchas y twitters que desean fervorosamente el triunfo del muchacho. Aunque podrían ser divertidos los memes al día siguiente de una nueva derrota. Lo merece y lo ganará. Y déjate ver que en un lustro no tenga dos o tres más.

-Eddie Redmayne por The Danish Girl: este es uno de esos papeles que parece destinado a premio, pero fijaos bien, he puesto papeles, sí en el papel, porque no hace falta mirar más allá, es un papel premiable y punto, da igual que el actor haga mohines de telenovela, que sólo se ría de cosas que nadie explica y que tenga la misma cara cuando folla con su mujer que cuando se pone una media y de pronto se acuerde de que él quiere ser ella. Y no es una crítica a la persona sino a cómo nos lo explican, porque si te descuidas la escena en la que mejor queda explicado es cuando se marca un “silencio de los corderos” metiéndose la polla entre los muslos y tu dices, ¡ah! Mira quiere tener toto. Dramático

Ganará si: la peña vota de peyote hasta el culo y ya. No hay más explicación.