Paraísos fiscales, infiernos terrenales
La crisis actual tiene tantos padres que las vías a través de las cuales abordar el tema son múltiples. El británico Mark Donne dirige su mirada a la escandalosa evasión fiscal que se practica de forma sistemática y masiva en su país (lo de España es un juego de niños al lado de lo que ocurre en el Reino Unido). Paraísos fiscales como las Islas Caimán -dependientes de la corona británica, no lo olvidemos- facilitan de forma asombrosa la tarea evasiva de las grandes empresas. Es inevitable esa sensación tan frustrante de saber que están robando dinero a espuertas en nuestra misma cara, pero que nadie hace nada por evitarlo.
Donne proviene del mundo blogger y periodístico, y se nota en una película funcional, que sirve como reportaje, pero que no supone ninguna búsqueda formal por parte de su autor. El film está construido a través de entrevistas y de una voz en off que nos guía por estos turbios asuntos financieros. El director elige reforzar su discurso rodeándose de nombres ilustres. Y así Dominic West ejerce como narrador, mientras Thom Yorke (Radiohead), y Robert del Naja (Massive Attack) se encargan de poner la música. Con el propósito de hacer llegar a la máxima audiencia posible su mensaje, Donne utiliza el cine como instrumento para su propósito. Con eficiencia, pero sin brillantez.
Manuel Barrero Iglesias
Our Nixon (Penny Lane. Estados Unidos, 2013)
Nixon en petit comité
Richard Nixon, además de ser republicano y convertirse en 1969 en el trigésimo séptimo presidente de los Estados Unidos de América, tiene el dudoso honor de ser considerado el dirigente norteamericano que más cerca estuvo de destruir a la democracia más importante del mundo. Un presidente que desvirgó definitivamente a su sociedad, que hasta el momento mantenía una ingenua auto-apreciación de garantes universales de los valores democráticos, poniendo de manifiesto las deficiencias de una administración en desbocada deriva autoritaria y delictiva, en un país fracturado generacional e ideológicamente por el fracaso bélico acumulado de Vietnam.
Imágenes inéditas y personales, que ven por fin la luz tras años de ostracismo en los archivos, de estos cinco años convulsos de la política americana, que completan un nuevo retrato de Nixon, con la peculiaridad de estar rodado y contado por los miembros del gabinete del presidente que fueron, además de cineastas frustrados, las tres cabezas de turco del escándalo Watergate. A pesar del interés indudable de la película y los documentos audiovisuales que ofrece, el producto final se convierte interesante especialmente para politólogos, fanáticos de la historia y política reciente de los Estados Unidos o para el mercado doméstico americano, quedándose ciertamente algo lejano para aquellos espectadores que no estén atraídos por este complejo personaje.
Ricardo González Iglesias
Con la música a otra parte
La
revolución que ha supuesto internet para el mundo es de tal
dimensión que aún no podemos definir con exactitud su alcance, que
sigue creciendo cada vez más y más. Pero los primeros análisis ya
se pueden ir haciendo, y una de las mayores transformaciones que ha
provocado la red es la de la industria musical. Un tema de complicada
solución y en el que todos tienen sus argumentos, ¿pirateo o
intercambio de archivos? Alex Winter recorre el proceso de las
descargas musicales a través de la historia de Napster, el primer
gran servicio de distribución de archivos de música.
A
través de imágenes de archivo y entrevistas actuales, Winter traza
con precisión la cronología de los acontecimientos. Desde la
inocencia de los adolescentes que pusieron en marcha un monstruo que
-sin que ellos mismo pudieran imaginarlo- acabaría siendo imparable, hasta la falta de visión de una industria anquilosada en el siglo
pasado. Pasando por los músicos, con opiniones tan dispares como las
que podemos tener cualquiera de nosotros. A pesar de tomar la
perspectiva de Sean Parker y Shawn Fanning (los fundadores de
Napster), el film trata de dar voz a todos los actores y tomar
distintas perspectivas. Y así tenemos una visión bastante complete
de cómo la industria musical cambió para siempre.
Manuel Barrero Iglesias
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