Fecha
de emisión: 2006 – 2011.
Número
de temporadas: 5 temporadas.
Reparto:
Bill Paxton, Chloë Sevigny, Jeanne Tripplehorn,Ginnifer Goodwin,
Matt Ross, Harry Dean Stanton, Amanda Seyfried, Douglas Smith, Grace
Zabriskie, Bruce Dern, Joen McKinnon Miller, Melora Walters, Mireille
Enos.
HBO
lanzaba Big Love en 2006, una serie ambientada en el muy
religioso estado de Utah, lugar donde la Iglesia de Jesucristo de los
Santos de los Últimos Días -conocida comúnmente como Iglesia
Mormona- es mayoritaria entre la población. Tiempo atrás esta
corriente religiosa defendía la poligamia, pero con el paso del
tiempo se fueron alejando de ella, llegando incluso a condenarla.
En
dicho contexto se nos cuenta la historia de una familia,
perteneciente a la Iglesia SUD -también se le conoce con esta
abreviatura- que a su vez practican la poligamia en la
clandestinidad.
La
serie tuvo duras críticas por parte de la Iglesia SUD debido a que
consideraban que podían dar a entender a la población que ellos
apoyaban dichas prácticas, aunque en la serie siempre se dejó de
manifiesto que no era así. Claro ejemplo es el hecho de que los
Henrickson tengan que esconder en todo momento su particular modo de
vida.
La
poligamia tiene capital importancia dentro de la historia de la
serie, mostrándonos dos formas muy distintas de practicarla. Primero
la que practica Bill Hendrickson -personaje principal de la serie,
interpretado por Bill Paxton- basada principalmente en el amor y el
respeto: se trata de una especie de familia tradicional formada por
un marido, tres mujeres y un buen puñado de hijos. Por otro lado nos
encontramos la poligamia practicada en el campamento en el que se
crió Bill y del que fue expulsado por su padre cuando sólo tenía
14 años. Aquí el matrimonio plural es retratado de una manera muy
distinta. Las familias parecen estar formadas por un señor y sus
esclavas, siendo muchas de ellas menores de edad, y no teniendo que
haber necesariamente amor de por medio.
Al
final la serie habla de amor, como su nombre indica, y de lo que
somos capaces de hacer para conseguirlo y conservarlo, además de lo
absurdo y problemático que resulta a veces acotarlo, racionalizarlo
e incluso aportarle una base legal. Big Love no aboga por el
matrimonio plural, pero jamás lo condena radicalmente. Más bien
parece estar del lado del amor, sin importar la estructura familiar
bajo la que se presente.
La
serie fue bastante constante, tanto en sus audiencias como en su
calidad. Se encontraba en la media de audiencia de la cadena,
alrededor del millón y medio de espectadores en su primera emisión,
llegando a los cinco millones gracias a las distintas reposiciones.
En
cuanto a la calidad, sin llegar a ser nunca uno de los buques
insignia de la cadena, lo cierto es que siempre mantuvo un nivel
bastante elevado, el cual fue creciendo temporada a temporada, siendo
la quinta y última temporada la más redonda de todas. Es una serie
a la que cuesta cogerle el punto, pero que si se es paciente acaba
por enganchar. Por experiencia personal también remarcar que gana
con cada nuevo visionado, sobre todo porque uno ya no espera de ella
más de lo que sabe que va a recibir pudiendo centrarse en disfrutar
de sus personajes algunos de ellos muy grandes. Así como de las
interpretaciones de su excelente elenco de actores, entre los que
destacan unos geniales Bruce Dern y Chloë Sevigny, y los nada
desdeñables Matt Ross, Mireille Enos, Harry Dean Stanton, Amanda
Seyfried, Jeanne Tripplehorn, Grace Zabriskie y, por supuesto, Bill
Paxton.
Big
Love se encuentra en ese grupo de series dramáticas de HBO que
han ayudado a hacer grande a la cadena, pero que ven su popularidad
ligeramente lastrada por haber compartido parrilla con algunas de las
mejores series de todos los tiempos – The Wire, The
Sopranos, Deadwood o Roma-. Aun así, un producto
de bastante nivel que recomiendo a todos aquellos a los que les
gusten los dramas bien hechos y aún no le hayan hincado el diente.
David Sancho