The
Conjuring (Estados
Unidos, 2013).
Dirección
y guión:
James Wan.
Intérpretes:
Vera Farmiga, Patrick Wilson, Lili Taylor, Ron Livingston, Shannon
Kook.
Guión:
Chad Hayes, Carey Hayes
Música
original:
Joseph Bishara.
Fotografía:
Jaohn R. Leonetti.
Montaje:
Kirk M. Morri.
Idioma:
Inglés.
Duración:
112 minutos.
Respetando los tópicos
De
entrada, a The Conjuring le tenemos que reconocer una cosa.
Siendo una película que mezcla sin rubor elementos clásicos de dos
subgéneros (el de casas encantadas y el de exorcismos), termina
siendo un film inquietante. Algunos incluso hablan de la película de
terror más impactante en los últimos años. Tampoco nos pasemos,
que para eso tendría que ser bastante más original de lo que es.
Pero
sí es cierto que la habilidad del director consigue que esos
elementos reciclados construyan un film muy efectivo. Wan sabe
dosificar con inteligencia los sustos, reduciendo los gratuitos al
mínimo. Aunque eso sí, mantenido el nivel de tensión siempre muy
elevado. También aplica el tempo adecuado, consiguiendo un in
crescendo dramático muy equilibrado.
Como
otros filmes de terror (pienso en La matanza de Texas), el
hecho de estar basado en sucesos reales le confiere un tono aún más
escalofriante. Más que eso, es la forma de rodar, buscando esa
credibilidad en cada plano. Nada que ver con el realismo sucio del
film de Hooper, pero con una recreación minuciosa de la época y de
los hechos. Wan usa en su justa medida elementos como la filmación
en Super-8, consiguiendo así que incluso algunos de los momentos más
fantásticos conserven ese halo de credibilidad.
Una
naturalidad también buscada en unas interpretaciones magníficas.
Lo de Vera Farmiga es sobresaliente, pero no desmerecen los
Patrick Wilson o Lily Taylor. Hasta las cinco hijas consiguen
mantener el tono. Siempre es más turbador cuando el terror se
conecta de alguna forma a los miedos reales del espectador, y esto es
algo con lo que juega muy bien The Conjuring.
Una
película que tira demasiado de tópico, y que recuerda demasiado a
otras muchas. A veces, peca de efectista, y en alguna ocasión
(por fortuna solo una, que yo recuerde) patina en el guión. Pero a
pesar de todo, estamos ante un producto muy bien elaborado que les
hará pasar un buen rato. O mejor dicho, un mal rato.
Manuel
Barrero Iglesias
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