En una decisión muy acertada, los responsables de Nocturna han decidido que cada proyección de un largo vaya acompañada por la de un cortometraje. Un formato que siempre supone un estimulante campo de experimentación. Aquí repasamos, de forma breve, todos los trabajos en formato reducido que hemos podido ver a lo largo del Festival.
Por Manuel Barrero Iglesias
Cold
Turkey (Fannar Thor Arnarsson, 2012)
Historia
de adolescente atormentado...por su canibalismo. Muy cruda en su
retrato del deterioro físico, tampoco hay mucho más que lo
desagradable de sus imágenes.
Project
Shell (Alejandro Jiménez, Fátima de los Santos, 2012)
Apenas
cuatro minutos para un corto que es, ante todo, una demostración de
intenciones. Un ejemplo de que en España se podría hacer
ciencia-ficción espectacular, si en lugar de haber dinero para
doscientos segundos, lo hubiera para cien minutos. Impecable a nivel
formal, lo que cuenta es una simple anécdota.
El
otro (Jorge Dorado, 2012)
estaba
presente en Alacrán enamorado, donde se convertía en un secundario
robaplanos. Hovik Keuchkerian protagoniza este cortometraje, que se
aprovecha de su fuerza interpretativa para agarrarnos desde el
principio. Visualmente potente.
Film
de atmósfera perturbadora que utiliza los códigos del slasher para
acabar contando una triste historia sobre extrañas criaturas que
sufren. Extraño trabajo de indefinición en su tono.
In(B)etween
(José Luis Martínez Díaz, 2012)
Rodada
con excelente pulso, un cortometraje ambicioso que exprime sus
escasos medios al máximo. Una localización y un actor bastan para
ilustrar este thriller apocalíptico lleno de tensión. Trata de ser
riguroso en su contenido, y se agradece el esmero en cuidar la faceta
interpretativa.
Tus
gritos me dan risa (Sergio Morcillo, 2012)
Gore
en estado puro para un film que se regodea en su espíritu de serie
b, a veces puede que demasiado. Una especie de zombie-payaso que
perturba la paz de una familia que celebra la Navidad.
Boys
from County Hell (Chris Baugh, 2012)
Vampiros
que atacan a tres obreros en la oscuridad de la noche, en mitad de
ningún sitio. Un paraje inglés en el que no hay nada (ni siquiera
trabajo) del que está deseando huir un joven que no se atreve a
decirle a su padre que ya no aguanta más allí. Lugares que pueden
llegar a chuparte la sangre, aunque no hubiera vampiros acechando.
Presence
Required (María Gordillo, 2012)
Comedia
que comienza con una hilarante premisa: un matrimonio queda desolado
tras la marcha del espíritu que vagaba por su hogar. Film construido
dando la vuelta al tópico del cine de fantasmas, y que trata de
aguantar el nivel de brillantez humorística durante sus doce minutos
de duración. No siempre lo consigue, pero sí que aguanta el tipo
con dignidad.
Entre
polvo y sangre (David Goole, 2013)
Quizás
demasiado ambicioso para los medios a su alcance. Junto a Cold Turkey
el trabajo más malrollista de los que repasamos aquí.
Asesino brutal y, como no, traumas pretéritos se unen en este
irregular film
Bello
y poético trabajo que estuvo nominado en la pasada edición de los
Oscar al mejor cortometraje de ficción. Los dos grandes temas que
preocupan al ser humano, el amor y la muerte, son retratados con
enorme delicadeza en un trabajo compuesto de imágenes poderosas.
Eutanas,
S.A. (Víctor Nores, 2013)
Obvia
crítica a una sociedad que cada vez tiende más a obviar a sus
ancianos. Una comedia de ciencia-ficción en la que la secuencia
estrella es esa en la que la abuela contrata su propia muerte. Humor
incisivo que da paso a una segunda parte menos brillante.
Grieta
en la oscuridad (Xavi Rull, 2012)
Claro
ejemplo de error de casting en la elección del protagonista. El
atractivo Roger Berruezo jamás resulta creíble como el joven
escritor, alumno aventajado de un novelista cuyo estilo parece
haberse radicalizado en los últimos tiempos. Un film que trata de
reflexionar sobre la crisis del creador, aunque al final no va mucho
más allá del golpe de efecto.
Asylum
(Carmen Sánchez-Dopico, 2013)
Ganador
del concurso 60 horas organizado por la Universidad Europea de
Madrid, breve cortometraje metalingüístico que se queda en
anécdota.
Horizonte
(Aitor Uribarri, 2012)
Reparto
de relumbrón (Ana Fernández, Claudia Vega y Manuel Morón) para un
corto que sigue la senda marcada por el tono apocalíptico y la
humanidad infectada por algún extraño virus. No aporta
prácticamente nada nuevo, y lo único que podría algo de juego (esa
característica diferenciadora de la niña) queda totalmente
desaprovechado.
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