Un plan perfecto (Gambit)

Gambit (Estados Unidos, 2012).

Dirección: Michael Hoffman.

Intérpretes: Colin Firth, Cameron Diaz, Alan Rickman, Stanley Tucci, Tom Courtenay.

Guión: Ethan Coen, Joel Coen.

Música original: Rolfe Kent.

Fotografía: Florian Ballhaus.

Montaje: Paul Tothill.

Idioma: Inglés.

Duración: 89 minutos.

2/10

Comedia rancia

No es de extrañar que los hermanos Coen hayan cedido el “privilegio” de dirigir este guión a un director ajeno. Incluso sus comedias consideradas menores (como Crueldad intolerable o The Ladykillers) contienen mucha más inteligencia que cualquier comedia hollywoodiense al uso. No es el caso de este libreto, remake de una película de 1966, lleno de humor burdo y tontorrón.

Lo único destacable que hay en Un plan perfecto son nombres. Los citados hermanos Coen en la escritura, y un trío protagonista de relumbrón: Colin Firth haciendo de típico inglés estirado, Alan Rickman en su rol de villano histriónico, y una Cameron Diaz que es la encarnación real de la Jesse de Toy Story 2. Sus presencias dignifican levemente unos personajes bastante lamentables, a la vez que causa algo de vergüenza verlos metidos en semejante embolado.

Una comedia demodé que recurre a enredos simplones y chistes de baja estofa. Algo que aspira a ser sofisticado, pero que se queda en vulgar. Y un director mediocre como Michael Hoffman (Un día inolvidable, El sueño de una noche de verano) no es capaz de sacar más partido a un material ya bastante inane.

Un plan perfecto es una de esas películas prescindibles, que hecha con habilidad, se podría haber convertido en algo encantador de consumo rápido. Por desgracia, lo que tenemos que soportar es un suplicio de nula gracia. Al menos, no sobrepasa la hora y media.

Manuel Barrero Iglesias