Social Icons

sábado, 6 de octubre de 2012

Sitges 2012: Día 1


Comienza la 45 Edición del Festival de Cine Fantástico de Catalunya. Sitges acoge del 4 al 14 de octubre lo mejor del género a nivel internacional. En sus distintas secciones podremos ver los últimos trabajos de gente como David Cronenberg, Takeshi Kitano, Dario Argento, Jennifer Lynch, Tsui Hark, Tim Burton, Takashi Miike, Léos Carax, Kim Ki-duk o Rob Zombie. Enorme variedad en una programación con la que es imposible aburrirse.

De la jornada inaugural comentaremos dos filmes. El de inauguración, honor que correspondió a la española El cuerpo; y dentro de la sección Noves Visions, vimos For Love’s Sake, del prolífico (y siempre interesante) Takashi Miike.


El cuerpo (Oriol Paulo)

Debut en la dirección del guionista de Los ojos de Julia, que deja clara su predilección por el suspense hitchcokiano. Una película con cadáver que desaparece, con crimen que pretende ser perfecto, con personajes torturados por traumas anteriores. Y con secretos, muchos secretos que se materializan en golpes de efecto. Quizás haya un abuso del factor sorpresa en la parte final, pero lo cierto es que el guión acaba muy bien cerrado y sin errores de bulto (algo que se agradece en los tiempos que corren).

Buena atmósfera para un producto, eso sí, que no deja de ser un sucedáneo. Lo bueno es que el director controla muy bien el tempo del suspense, manteniendo siempre la atención del espectador. Y atención a Belén Rueda, en el que probablemente sea su mejor trabajo, con un personaje algo distinto de lo que nos tiene acostumbrado.


For Love’s Sake (Takashi Miike)

Una de las dos películas que el japonés presenta este año es esta adaptación del manga creado por Ikki Kajiwara y Takumi Nagayasu. Una historia de amor adolescente, pero con ese inconfundible toque violento de Miike, donde las palizas se suceden sin ningún rubor. Hay chicos que pegan a chicas, niños pequeños que hacen lo propio con otros de su edad. Nada es tabú en una película que, en el fondo, posee una inmensa ternura.

No queda ahí la cosa, ya que el film también es un delirante musical. Con unos personajes de indudable carisma y una narración llena de ironía, el director nos hace disfrutar de este explosivo coctel. Es cierto que se le va algo la mano en el metraje, pero debo confesar mi debilidad por el Miike hiperbólico. Y quizás sea eso lo que le falte al film para ser redondo, más exageración aún.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
 
Blogger Templates