"No hacemos parodia, recreamos la realidad"
Revolucionaron
la red con una serie de hilarantes cortometrajes que retrataban
varios personajes muy reconocibles de la sociedad sevillana. Trabajos
que traspasaron fronteras gracias a sus magníficos guiones y al
enorme trabajo interpretativo de sus protagonistas. El Culebra y el
Cabesa han dado el salto al largometraje gracias al crowdfunding. Con
el lema 'Apadrina a un tieso', Alfonso Sánchez y Alberto López han
conseguido que doscientas personas hayan participado en la producción
de El mundo es nuestro, con aportaciones a partir de 120 euros. El
resultado merece la pena. Una muy fresca comedia que escribe y dirige
Alfonso, que también la protagoniza junto a Alberto. Ambos nos
cuentan sus impresiones sobre esta experiencia.
Por Manuel Barrero Iglesias
Me
gustaría que me contaréis cómo ha sido el proceso de producción
¿Se puede saber cuál ha sido el presupuesto final?
-Alfonso
Sánchez: En gastos de dinero, habrá sido entre 150-170 mil euros.
Pero la película está compuesta, además, por el trabajo del equipo
y los actores, que lo han “puesto” en coproducción. Todo hace un
coste total entre 600 y 800 mil euros. Digo “entre” porque no
está cerrado, todavía estamos gastando dinero.
¿Y
cuánta gente ha participado finalmente en esta iniciativa de aportar
dinero para que se hiciera la película?
-A.S.:
No lo he calculado, pero la lista de agradecimientos es más larga
que la película. No sé, 180 o 200 personas. Una locura.
¿Cómo
habéis conseguido que todo el equipo trabaje de esta forma, sin
cobrar nada hasta que el film consiga beneficios?
-A.S.:
Con sangre sudor y lágrimas.
-Alberto
López: Y con un trabajo previo, que desde que empezamos con los
cortos han generado una repercusión mediática en torno a ocho
millones de vistas en la red. Hay una cartera de clientes detrás,
eso espero. El que ha venido, sabía a lo que venía.
-A.S.:
Y Mundo Ficción llevaba una trayectoria de diez años ganando
premios internacionales a espuertas. Más de 50 premios nacionales e
internacionales. Es cierto que esto sirve precisamente para el equipo
que está alrededor.
¿Cómo
os habéis sentido en un proyecto de estas dimensiones? Ha sido más
fácil o más difícil de lo que pensabais...
-A.L.:
La verdad es que nos hemos visto en la misma tesitura, manteniendo el
mismo nivel de concentración y de honestidad a la hora de trabajar.
Evidentemente, no es lo mismo hacer un corto en dos o tres días, con
tres o cuatro personas que esto.
Además,
aquí hay secuencias con muchos extras.
-A.S.:
Sí, los exteriores. Fueron solamente tres días de rodaje, y
comprimimos aquello, que era una locura. Los interiores se diseñaron
para que fueran abarcables. En dos semanas y media o tres tuvimos
todo el grueso de la película, que son los interiores del banco.
¿Cómo
es Alfonso como director? Es de estos tiranos, o de los que dejan
hablar...
-A.L.:
Genial. Es que si no, la película no sale. Bueno, me imagino que con
la tiranía saldrán grandes proyectos también, pero seguro que la
gente no está tan a gusto. Es fantástico, es dócil, te transmite
mucha confianza en lo que estás haciendo, y tiene mucho cuidado por
la interpretación. La gente muy sorprendida, trabajando muy a gusto.
Mucho amor en los ensayos, muchos datos, muchas referencias
cinematográficas que están dentro de su imaginario. Creo que para
la industria y para los compañeros es un descubrimiento.
-¿Y
Alberto como actor?
-A.S.:
Es un tipo con una capacidad de trabajo extraordinaria, que se
compromete de una manera brutal, porque es su vida. Y además, se la
juega. Yo creo que por eso -al menos antiguamente- los actores
estábamos adscritos en la seguridad social junto a los profesionales
taurinos. Porque nos jugamos la vida en cada curro. Y Tener un actor
que se la juegue como si cada interpretación fuera a ser la última,
es un lujo de la hostia.
Y
lo digo siempre, para mí es el Jack Lemmon español. Tiene esa
cualidad innata, como Lemmon, y es que tú lo ves aparecer en
pantalla, y dices “a ver qué le pasa a este tipo”. Esa empatía,
desgraciadamente para muchos y afortunadamente para unos pocos, o la
tienes o no la tienes. Y en este caso, él la tiene.
Os
he escuchado decir que la película está basada un poco en el
corralito argentino. Quién os iba a decir cuando empezaste a
escribirla que ahora iba a tener tanta actualidad...
-A.S.:
¿Quién nos lo iba a decir? Los medios de comunicación y los
políticos, no. Pero ahí estaba, se olía en el ambiente. Ha
llegado, y esperamos que no vaya a más. Desgraciadamente, nos
levantamos cada día con noticias a cada cual más bizarra y más
extraña. Y esperemos que esto llegue a un tope. Porque a la gente la
puedes apretar, pero tiene un límite. Como un tornillo, si lo
aprietas mucho, se pasa de rosca….
-A.L.
: Y se meten fuego, o se tiran por las ventanas.
-A.S.:
Es muy peligroso. Votan a partidos de ultraderecha nazi siendo
griegos. Ocurren cosas muy extrañas.
Siempre
habéis hecho reír con parodias, pero que son muy realistas. No
como, por ejemplo, Los Morancos, que es todo muy exagerado. Siempre
tenéis ese punto de realidad...
-A.S.:
Sé que puede parecerlo, pero nosotros no hacemos parodia, nosotros
creamos personajes.
-A.L.:
Recreamos la realidad. Sería una crónica de lo que va pasando desde
que empezamos con esto hasta ahora.
-A.S.
: Nuestro trabajo tiene que ver mucho con, para tener un referente
reconocible, lo que hace Sacha Baron Cohen en Borat y demás. Mucha
gente se planteó que Alberto y yo éramos dos 'canis' y que nos
habían grabado en la calle. Ese nivel de realidad te lo de trabajar
como Al Pacino. Para nosotros, ese es el nivel y ese el trabajo. Que
somos una pareja, y eso da para asociarlo al típico dúo cómico.
Pero bueno, es una cosa que la gente se va a dar cuenta que no es así
a través de la película.
Me
gusta mucho una cosa de la película. Es muy sevillana, y se nota que
queréis a la ciudad, pero también es muy crítica con ciertas
partes de Sevilla. No sé si mantenéis con la ciudad esa relación
de amor/odio...
(Risas)
-A.S.:
Sí, de hecho, en el primero de los cortometrajes, mi primer
agradecimiento fundamental es “Dedicado a Sevilla, ciudad a la que
amo y odio a partes iguales”. O sea que…
-A.L.:
Sí, Ya lo decían los Pata Negra en Guitarras callejeras, que
Sevilla tiene dos partes, dos partes muy diferentes. Para nosotros,
tiene tres, trescientas o tres mil. Habrá algunas que ames más, y
otras que ames menos. Pero no creo que sea una relación de
amor/odio. Yo creo que todo el mundo con sus ciudades tiene un poco
de eso. De hecho, seguimos viviendo allí. En su momento, pudimos
elegir: Madrid, Barcelona…pero hemos elegido, y ahora estamos
haciendo...
-A.S.:
estamos haciendo por y para Sevilla. O sea, que esto no se quede
simplemente en una cosita que hicimos una vez. Intentar que quede la
infraestructura que hemos creado para hacer todo esto, que es una
estructura tipo holding, uniendo a empresas y a gente de Sevilla.
Intentar que toda esa energía no se diluya después de esto. Y no
irnos a Madrid a hacer otra película. Si todo funciona, seguir
produciendo en nuestra ciudad. Hecho en Sevilla para el mundo.
Paco
León va estrenar ahora su película simultáneamente en cines,
internet y DVD, ¿os planteasteis la posibilidad de hacer algo
similar?
-A.S.:
No. Lo que hace Paco es dar un golpe en la mesa, y hacer algo que
alguien tenía que hacer. Paco se lo puede permitir, porque tiene
medio millón de fans en twitter, y una serie de éxito que le da el
sustento para poder mantenerse. Pero éste y yo tenemos que comer. Y
nosotros le apoyamos absolutamente, como mucha gente del sector.
Ningún productor de España que sea valiente no va a apoyar a Paco
León. Otra cosa es que no se manifiesten públicamente para no
echarse encima a según qué sectores. Desde aquí, ya te digo:
“Paco, ¡con dos cojones!”.
Vuestro
público viene de internet, ¿cómo creéis que va a responder? Que
conste que ya he leído a muchos que han dicho que van a ir al cine a
ver la película.
-A.S.:
El ejemplo ha sido el de los seguidores extremeños, que se ha
formado una…casi se nos rebela Extremadura, qué locura. Hubiera
sido un hito. Les putean con el AVE, les putea todo el mundo.. y
ahora encima nosotros no llevamos allí la película. Pero bueno, al
final hay copia en Cáceres
Para
terminar, me gustaría que me contarais como creáis y os metéis los
personajes que hacéis.
-A.L.:
El imaginario que tenemos de vivir en una ciudad como Sevilla, que
nos hemos criado en el extrarradio. Hay muchos puntos de referencia
para este tipo de prototipos en Sevilla.
Nos
apuntamos a un gimnasio de boxeo tres años, dándonos hostias con
los 'canis' en el peor barrio. Íbamos de compras vestidos como el
Culebra y el Cabesa, para ver la reacción de las marujas. En el
proceso de rodaje nos ha parado la guardia civil, la policía...un
pifostio.
Y
la base viene de la preparación en su día para el corto Esto ya no
es lo que era. Y también, tirar mucho de instinto. Cuando lo tienes
tan claro después de mes y medio de ensayo, ya confías mucho en el
instinto. Para nosotros, nuestra labor como actores y como
intérpretes de la realidad es no perder detalle. En el metro, cuando
bajemos, aquí contigo...
-A.S.:
Y, sobre todo, ser muy valiente. No tener miedo de permitirte jugar.
En esto, los ingleses con muy listos: lo llama “to play”.
Nosotros lo llamamos interpretar. Pero yo prefiero jugar.