Creada
por: David
Milch
Fecha
de emisión:
2011
Número
de temporadas:
1
temporada.
Reparto:
Dustin
Hoffman, Nick Nolte, Dennos Farina, John Ortiz, Hill Hennessy, Ian
Hart, Michael Gambon, Joan Allen, Kerry Condon, Kevin Dunn, Richard
Kind, Jason Gedrick.
Pocas
series han prometido tanto desde sus inicios como Luck.
Creada por David Milch (Deadwood, John from
Cincinnati) y producida, además de dirigir el piloto, por
Michael Mann (Heat, El dilema, Corrupción en
Miami). Dos pesos pesados que reunían un elenco de lujo
encabezado por Dustin Hoffman, Nick Nolte, Dennis
Farina, Joan Allen o Michael Gambon;
uno de los repartos más impresionantes que yo recuerde para una
serie de televisión.
La
trama de la serie gira en torno a las carreras de caballos, y a los
intereses económicos que giran en torno a ellas. Miembros de la
mafia, entrenadores de caballos, jockeys, apostadores,… una
amalgama de personajes que se ven envueltos en historias relacionadas
con las segundas oportunidades, con la redención.
Las
tramas de Luck son modélicas, nada que
decir al respecto. Milch vuelve en este sentido a la senda tomada en
Deadwood y que tan buen resultado le dio. El problema es
que para la escritura toma el camino iniciado en John from
Cincinnati, y sus diálogos surrealistas. Diálogos
que desconciertan y hacen que el espectador se pierda de vez en
cuando, rompiendo con el ritmo y el tono de la serie, devaluando
el producto hasta volverlo mediocre.
No
es que se trate de una mala serie, la cuestión es que Milch se
pierde en su propio universo, incapaz de discernir lo que es
provocador e innovador de lo que es autorreferencial y excesivo.
Por suerte, no todos los personajes se marcan soliloquios
indescifrables como si de dementes se tratasen; y la mayoría de
ellos mantienen la coherencia durante toda la temporada, lo cual
también genera un nivel de irregularidad excesivo en un conjunto que
se ve lastrado por ello.
Al
final la serie tiene más momentos brillantes que ridículos, pero en
un producto de este nivel estos últimos son inaceptables. Con el
despliegue visual del que hace gala y la factura técnica tan
impresionante que tienen todos los episodios, resulta indignante que
el resultado se eche por tierra de esta manera. Aunque también hay
que reconocerle a Milch la valentía de mantenerse firme en sus
convicciones artísticas y no ceder ante el miedo al fracaso, ese
que ya saboreo con John from Cincinnati.
Como
resultado tenemos una serie compuesta por una sola temporada de nueve
episodios, que no podremos comprobar si mejora o si se mantiene en la
irregularidad. La versión oficial dice que el motivo de la
cancelación son las protestas de PETA con respecto a la muerte de
caballos durante el rodaje de la serie, y puede que sea así; pero
sin ninguna duda la escasa confianza del público en la serie también
tiene que haber jugado un papel importante en su cancelación.
Expectante
estoy ante los futuros proyectos de Milch, por saber si volverá a un
modelo de narración más convencional o si seguirá en sus trece y
continuará perfeccionando su propio estilo hasta dar con la fórmula
adecuada… a pesar de lo dicho espero que pase lo segundo, que de
los primeros ya tenemos unos cuantos.
David
Sancho
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