Destacamos esta semana los dos estrenos asiáticos, dos propuestas bien diferentes. El iraní Jafar Panahi rompe la prohibición de su gobierno, y realiza algo más que una film. Esto no es una película es toda una declaración de resistencia. Un tono mucho más amable presenta Kiseki, la última película del japonés Hirokazu Kore-eda (Nadie sabe). Una entrañable fábula protagonizada por los hermanos Maeda, estrellas infantiles en su país.
Dispuesta a arrasar en taquilla llega Los juegos del hambre, ciencia-ficción para adolescentes que utiliza el recurso (recuerden Battle Royale) de juego de supervivencia. El otro film procedente de USA es Soul Surfer, historia de superación basada en hecho reales: una famosa surfista que perdió un brazo por culpa de un tiburón-
El sueco Lasse Hallström nos trae una agradable comedia británica protagonizada por Ewan McGregor y cuyo curioso título es La pesca del salmón en Yemen. Y como no, un estreno 'rezagado'. La rumana Si quiero silbar, silbo; Gran Premio del Jurado en Berlín 2009.
No hay comentarios:
Publicar un comentario