Las aventuras de Tintín: el secreto del Unicornio

7/10

The Adventures of Tintin: Secret of the Unicorn (USA, 2011).

Dirección: Steven Spielberg.

Intérpretes: Jaime Bell, Daniel Craig, Simon Pegg, Nick Frost, Andy Serkis, Toby Jones.

Guión: Steven Moffat, Edgar Wright, Joe Cornisa sobre el comic de Hergé

Música original: John Williams.

Fotografía: Janusz Kaminski.

Montaje: Michael Khan.
Idioma: Inglés.

Duración: 107 min.

Recuperando el mejor cine de aventuras

Supongo que los que no somos fans de Tintín, los que crecimos leyendo a Agostini y Uderzo, a Tolkien, a Road Dahl o a John Christopher, en vez de a Hergé; afrontamos el visionado de la película de Spielberg de una manera muy distinta a aquellos que tienen una clara imagen formada en su cabeza de cómo debe de ser el universo de Tintín. Las expectativas ayudan a disfrutar una película cuando estas se ven colmadas, pero cuando no lo son, pueden convertir a una buena película en una decepción tremenda que se anclará en nuestra memoria de por vida.

Lo primero que hay resaltar es el hecho de que Las aventuras de Tintín es una película infantil que no disgustará a los adultos que lleven a sus hijos o sobrinos al cine. Una película de aventuras con unas cotas de acción difíciles de ver en la gran pantalla. La hora final, por no decir algo más de una hora, es una persecución continua; un derroche de humor y encanto, entremezclados con amplias dosis de adrenalina, que te mantienen anclado a la butaca con los ojos como platos pidiendo más, haciendo que al final los adultos disfrutemos casi más que los pequeños. Una película que devolverá a la infancia a todos aquellos que eran adictos a la literatura de Herré, y que abrirá el apetito hacia ella a todos aquellos que no la degustamos en su momento.

La historia, relativamente sencilla, da pie a que Spielberg se desate en un torrente de escenas imponentes, y una devoción hacia los cómics que se palpa en todo momento. Desde la escena inicial en la que se nos presenta a su protagonista, hasta cada aparición de Hernández y Fernández. Esta adaptación está hecha con mucho respeto, admiración y, sobretodo, un cariño extremo hacia los cómics.

Una producción titánica, un producto cinematográfico modélico que nos devuelve a uno de los maestros del cine de aventuras en pleno estado de forma tras su último traspiés con la cuarta entrega de las peripecias de Indiana Jones, dándole el testigo a Peter Jackson, a quien le deja la dura labor de superar algo que se nos presume difícil: cine para todos los públicos en el mejor sentido de la expresión, cine vibrante y con músculo capaz de divertir durante más de 100 minutos hasta al espectador más sesudo.

David Sancho